Hay quien todavía tiene una imagen distorsionada de lo que es trabajar en una compañía de seguros, sin embargo es un sector líder en empleo de calidad y así lo demuestran sus contratos estables, políticas de igualdad y conciliación familiar, beneficios sociales, planes de carrera, formación subvencionada o programas de captación de talento, y éstas solo son algunas de las características del empleo que genera el sector seguros.

Todo aquel que quiera dedicarse a trabajar en el mundo de las aseguradoras se encuentra con un mercado de más de 300 empresas, es un sector rico en oportunidades y un lugar perfecto para demostrar el talento.

No hay que perder de vista que el sector seguros genera tranquilidad a los asegurados y a los ahorradores, gestionando los riesgos y colaborando en la economía de un país. En España la actividad aseguradora representa el 5,3% del PIB a lo que hay que sumar la confianza y el bienestar social que aporta y que es fundamental para el consumo y la inversión.

 

Trabajar en seguros es trabajar en un sector que ayuda a solucionar problemas tanto a personas como a empresas.

 

Os dejamos algunos datos que dan idea de la función social del la industria aseguradora:

    • Genera más de 50.000 empleos directos.
    • Un 96% de los contratos son indefinidos.
    • Más del 90% de las personas que integran las plantillas han recibido algún tipo de formación en el último año.
    • La antigüedad laboral media es de 14 años.
    • Contribuye al bienestar general mutualizando riesgos y también con sus políticas de responsabilidad social corporativa, a través de las que se aportan 112 millones de euros a proyectos para mejora de la sociedad.
    • Da oportunidad al talento joven, con programas exclusivos y becados de formación con plan de carrera.
    • Ayuda a planificar la jubilación con productos de ahorro-previsión ajustados a nuestras necesidades. El ahorro gestionado en 2018 supera los 185.000 millones de euros.
    • El seguro de vida ayuda a más de 60.000 familias que cada año sufren la tragedia de una muerte inesperada, equilibrando su situación económica.
    • Tiene un importante papel como inversor, gestionando el ahorro de calidad a largo plazo y comprando deuda pública, una inversión beneficiosa para todos ya que es la principal vía de financiación de infraestructuras, escuelas, hospitales…
    • La solvencia aseguradora en España es sólida con una media de casi 2,5 veces el mínimo exigido a nivel europeo.

 

La mediación, una profesión de futuro

 

La política de gestión financiera prudente y muy profesional llevada a cabo por la industria aseguradora durante muchos años ha propiciado que este sector haya sido capaz de crear empleo durante la crisis económica, manteniendo una línea ascendente en su ratio de solvencia. Todo ello nos da idea de la gran estabilidad de la que disfruta.

La mediación es un destino sumamente atractivo para aquellos que están preparando su futuro profesional. Al sector asegurador se puede acceder desde un amplio abanico de especialidades universitarias u otro tipo de formación de grado medio y ofrece un horizonte prometedor para todo aquel que decida iniciar su andadura empresarial.

Muy atrás ha quedado el maltratado concepto del “vendedor de seguros” que nos ha mostrado el cine norteamericano; el típico personaje trajeado y con maletín, que se planta en la puerta dispuesto a venderte lo que sea. Por suerte, aquí, existe la figura clave del mediador de seguros, profesional del asesoramiento en materia aseguradora.

 


El mediador de seguros es un profesional con alto grado de conocimiento, con una formación continua y capaz de ofrecer un asesoramiento muy especializado que difícilmente se puede conseguir por otro canal.

 

Particulares y empresas deben tener en cuenta una gran cantidad de factores antes de contratar cualquier tipo de seguro, en el caso concreto de un seguro de vida además intervienen factores emocionales que requerirán un exhaustivo análisis de la situación económica, familiar, laboral y fiscal de la familia.

 

Si pensamos en la necesidad concreta de ahorro para la jubilación, la formación especializada en productos de ahorro y en fiscalidad es esencial para optimizar la combinación de garantías, riesgos y rentabilidades financieras y fiscales, ajustándose a las necesidades y el perfil de riesgo de cada cliente.

 

La función del mediador es la de realizar un análisis de riesgos y necesidades económicas, y construir el producto “a medida” capaz de proteger y salvaguardar el bienestar de los asegurados y sus familias.

 

Comenzar en la profesión de Mediador supone, en muchos casos, comenzar una carrera profesional para toda la vida, con posibilidades reales de prosperar y realizando un trabajo muy satisfactorio que ayuda a las personas a vivir su vida con más tranquilidad. El techo lo pones tú, depende del número de clientes que llegues a asesorar.

 

Las necesidades económicas y emocionales que cubre el sector asegurador a través de la mutualización de riesgos seguirán estando ahí en el futuro, no es un sector que vaya a quedarse sin trabajo porque se produzcan avances tecnológicos. Al contrario, debido a factores demográficos y al envejecimiento de la población, la tendencia es que los Estados vayan reduciendo las prestaciones de fallecimiento y jubilación que proporciona el sistema público de pensiones, dejando un campo cada vez más amplio al sector asegurador que cubre estas necesidades de forma sostenible.

 

Si estás buscando tu oportunidad puedes solicitar una de nuestras becas formativas del Plan Impulsa aquí.